Educación virtual en México: el reto de la conectividad
La pandemia del COVID-19, obligó a las instituciones educativas a pasar de las clases presenciales al modelo de clases en línea. El problema: 1 de cada 4 alumnos no tiene acceso a internet.
La conectividad, es el principal reto de la educación virtual en el país. Más del 40% de estudiantes y profesores, carecen de los medios tecnológicos para mantener vivo este derecho universal. Por eso es una de las áreas prioritarias de Rotary.
Con casi 37 millones de estudiantes, 2 millones 100 mil docentes y poco más de 265 mil escuelas, México tiene el quinto sistema educativo más grande del mundo y con ello, un reto enorme que requiere el apoyo de la comunidad.
Según estimaciones de la UNESCO, la educación básica es capaz de reducir la pobreza hasta en un 50% a nivel mundial.
La conectividad, es una herramienta que nos permitirá estar unidos en estos tiempos de pandemia, crisis y distanciamiento.
Las carencias de la educación en México.
La pandemia ha mostrado la realidad de muchos temas sociales: una de ellas, que al sistema educativo mexicano le urge un cambio de estrategia para tener mejores resultados.
Desde antes que llegara el COVID-19, ya se hacían evidentes la inequidad y baja calidad, como parte de los principales problemas en la educación de México.
Es triste, pero evaluaciones nacionales e internacionales, reportan que los niños y jóvenes mexicanos no alcanzan los logros de aprendizaje indispensables para su desarrollo.
Carencias de infraestructura en zonas rurales, falta de cobertura y un presupuesto público de menos del 8% del PIB nacional. Así de rezagado es el impulso a las escuelas.
La brecha de la conectividad en el país.
Ahora pasa que el acceso a la educación, es sinónimo de pagar internet y tener una computadora o Smartphone. Esto en un país donde más del 60% de la población vive en condiciones de pobreza, según la CEPAL.
Por otro lado, datos de la UNESCO estiman que, en México, 24.84% de los estudiantes entre 7 y 17 años no tienen acceso a internet y 4.47% no cuenta con televisión.
Además, la carencia de plataformas virtuales eficientes, pone en peligro la principal herramienta para combatir la corrupción, la pobreza y la inequidad: la educación básica.
El impacto en la educación.
Todas las cifras desalentadoras de conectividad tienen un resultado: 78.6% de las personas en México, reportan dificultades para continuar con la educación de niños y adolescentes en casa.
Sin duda, el COVID-19 ha impactado de manera profunda en el sistema educativo de nuestro país. Y es que la falta de inversión para modernizarlo, representa el mayor obstáculo para preparar adecuadamente a los niños y niñas.
Algunos expertos en la materia, coinciden en que, al trasladar la educación al internet, también se trasladaron las malas prácticas pedagógicas.
Hoy más que nunca, se requiere de un gobierno que invierta en capacitar bien a sus docentes y en garantizar la hiperconectividad de la sociedad.
Los retos de la educación virtual:
Reto tecnológico.
No podemos hablar de educación virtual si, estudiantes y docentes, no cuentan con las herramientas tecnológicas e internet para conectarse.
En México, apenas el 43% de la población es usuaria de computadora.
La mayoría de los estudiantes toman clases a través de otros dispositivos como el celular. Y en el peor de los casos, consiguen tareas y apuntes con sus compañeros de clase.
Para superar este reto, se necesita actuar como verdadera comunidad. Demandar al gobierno que proporcione los dispositivos para que ningún estudiante o profesor carezca de conectividad.
Y que mejor si nosotros, como ciudadanos, nos comprometemos a auspiciar o apoyar a través de campañas a quienes no cuentan con las herramientas tecnológicas. Aportando así a la promoción de la educación en un contexto virtual.
Podemos formar grupos de voluntarios, donar los dispositivos que ya no utilizamos, cooperar entre amigos o formar parte de las organizaciones que, como Rotary, están ayudando a cientos de niños y jóvenes donando dispositivos móviles.
Reto pedagógico.
Los líderes de la educación, son los maestros. Ellos son los encargados de formar e impactar en la vida de los futuros científicos, gobernantes, emprendedores y toda vocación existente.
Sin buenos maestros, no habrá buena educación. Por esto es esencial que, hoy más que nunca, cuenten con capacitación de calidad.
Actualizar a nuestros maestros en el uso de plataformas tecnológicas y fortalecer su método de enseñanza a través de las clases en línea, será la clave para mejorar el sistema educativo mexicano a corto plazo.
Necesitamos docentes que tengan el liderazgo para hacer frente a los retos de la educación virtual, e incluso a promover los cuidados que niños y adolescentes deben tener en esta pandemia.
Ningún país puede sobrevivir sin maestros. Ellos son los arquitectos de la sociedad que tanto visualizamos.
Los retos de la educación virtual, ponen en estado de ebullición temas como la injusticia social, la inequidad y el efecto dominó que generan los problemas de los grupos vulnerables.
La conectividad en esta pandemia se traduce en la oportunidad de trabajar, estudiar, formar parte de la economía e incluso participar en las decisiones de nuestro país, en esta época digital.
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